Madera sagrada
Es un árbol silvestre nativo de México y América del Sur, la Península de Yucatán, Perú y Venezuela (entre otras).
Mide unos 18 metros de altura, mediano con copa de hojas pequeñas bifoliadas (tiene dos hojas opuestas) y gran cantidad de ramas y frutos en forma de cápsula color verde oscuro. Se le considera un árbol con dotes medicinales y espirituales.
Lo que caracteriza al Palo Santo es que sus propiedades empiezan a aparecer cuando el árbol se seca y muere, es decir, tienen que pasar algunos años para que la madera empiece a desarrollar los componentes que generan su característico olor.
El origen del palo santo es muy antiguo, lo utilizaban los Chamanes Incas en sus rituales religioso-espirituales, como herramienta para atraer la buena suerte, alejar las energías negativas y conectarse con sus dioses.
Actualmente se utiliza de diferentes modos:
- Aceites esenciales: el árbol vive aprox. 40 años y debe morir por sí solo y estar muerto 7-10 años para dejarlo secar y extraer el aceite perfecto.
- De la leña del árbol, se obtiene el aceite corporal, los inciensos y los aromas. La corteza macerada en alcohol se utiliza para aumentar la sudoración y contra el reuma. Las hojas se utilizan contra los espasmos y como insecticida.
Cómo usarlo:
- Limpia tu aura; te ayuda a fortalecer tu escudo mágico de las malas energías u otros problemas.
- Ayuda a sanar las cicatrices emocionales; evoca los poderes del amor y la luz e incita nuestro aura a sanar sus cicatrices.
- La esencia mágica eleva tus vibraciones y a atrae la buena suerte. Ley de atracción
- Es antiséptico; estimula nuestro sistema inmunológico y viral. También es un repelente para mosquitos
- Tiene propiedad antidepresivas; se usa en terapias de Reiki, prácticas de yoga y aromaterapia.